Comenzando el 2018
- Zoar Malek
- 2 ene 2018
- 1 Min. de lectura
Hay para quienes comenzar un nuevo año es algo estresante, duro, agotador. Hay para quienes los ciclos que se cierran pueden ser deprimente, alarmantes e incluso temibles. Lo cierto es que la vida es un abrir y cerrar de ciclos, y un cambio de año, si bien marca un final, es también un nuevo comienzo, una oportunidad de renacer, de comenzar de reinventar todo aquello que no nos dejo satisfechos. Hoy comienza un año, y de todo aquello con lo que lo llene dependerá que al final haya sido un buen o mal año, de mi capacidad para llenar cada instante, inventar una vida a mi gusto, construir, e incluso ir tras aquello que he ido postergando. Del presente construido cada segundo dependerá la belleza del pasado, y la plenitud del futuro, no tenemos buena o mala suerte, solo tomamos desiciones que dan forma a nuestros días. De una buena decisión ahora tendremos un bello recuerdo después y seguramente también un buen instante siguiente. Los ciclos son solo ciclos, se abren y se cierran, pero la capacidad de llenar cada segundo esta en nuestras decisiones.
Este año, estoy mas cerca que nunca de los cincuenta años, de hecho será mi ultimo año como cuarentona, pero al igual que cuando llegue a los cuarenta no estoy dispuesta a que la edad me limite, por el contrario, espero que esta me vuelva más plena y mas segura para ir tras lo que quiero. Los buenos deseos de los demás, cuando son sinceros, son hermosos, pero nuestra plenitud es solo una decisión personal.

Comentarios